Hablemos de Berdon

HABLEMOS DE BERDON

Síndrome de Berdon o MMIHS

Historias de una familia Berdon

Historias de Fe, Ciencia y Acción

Sobre el síndrome de berdon

Somos muchas las familias alrededor del mundo, unas 300 hasta ahora, al menos conocidas, que vivimos con estos maravillosos niños. En este Blog dedico un valioso tiempo para contar nuestra historia, una historia llena de emociones fuertes, esperanza, aprendizajes y hermosas experiencias con estos pequeños guerreros nacidos con este síndrome y cómo mediante la fe, la ciencia y la acción hemos podido desafiar el pronóstico que según los doctores teníamos con nuestra niña.

Espero profundamente poder ayudar a muchos padres y niños que apenas inician este largo camino, el camino de aprender a vivir con esta condición; no es NO aceptar la condición, es NO aceptar que por su síndrome, no se pueda ir más allá y darles un mejor estilo de vida.

Se trata de aprender, que si la vida te da limones, entonces… hacemos limonada.

“El síndrome de megavejiga-microcolon-hipoperistaltismo intestinal (MMIHS) o síndrome de Berdon, es una grave enfermedad autosómica recesiva con un pronóstico de vida inferior al año. Es un hecho habitual que se detecte antes del nacimiento y se manifiesta rápidamente en el período neonatal inmediato, con una vejiga distendida y la disminución o ausencia de peristaltismo en el tubo digestivo. La obstrucción intestinal, habitual en estos pacientes, imposibilita la alimentación por vía enteral y provoca distensión abdominal y vómitos biliosos persistentes. Presenta una incidencia muy baja; el primer caso descrito por Berdon fue en 1976 y desde entonces, apenas se han publicado un centenar de casos. El pronóstico de esta enfermedad es grave y aunque existen algunos casos de supervivencia prolongada, la mayoría de los afectados no superan el primer año de vida, falleciendo habitualmente por complicaciones postoperatorias, secundarias a nutrición parenteral, sepsis e insuficiencia renal. En la estrategia terapéutica una de las claves es el soporte nutricional, sobre todo a través de la vía parenteral durante meses, lo que afecta en gran medida a la calidad de vida del paciente y de la familia”.